Pues sí. Hoy es miércoles y en Zaragoza es fiesta. Es una fiesta muy popular, en la que la tradición manda salir al parque a pasar el día, en plan picnic. Desde que yo era niño esta fiesta se hacía en el parque del Tío Jorge, el parque del Arrabal por antonomasia. Era una fiesta muy alegre. Recuerdo ir con mi padre y dar un paseo por el parque, ese día totalmente distinto, lleno de vida y de luz. Con el tiempo lo que era una fiesta popular, tipo familiar, se tornó ya más en fiesta, sobre todo por las tardes, cuando los efectos del ya famoso botellón (en este día más justificado que nunca), nos nublaban la vista y la ética ciudadana, y el respecto por el propio parque se empezaba a perder, quedando éste en un estado calamitoso, que obligaba a emplearse realmente a fondo a númerosas brigadas de limpieza durante los días siguientes.
Han sido muchas las cincomarzadas en las que he tenido oportunidad de visitar el parque del Tío Jorge, como buen arrabalero; muchas de día completo, otras sólo una visita, pero siempre me ha agradado mezclarme con la gente, y con el ambiente reivindicativo que se respira, en los distintos puestos que se montan para la ocasión...desde partidos políticos, asociaciones de vecinos, peñas, etc...que normalmente, además, están provistos de comida y de bebida, para el que no haya podido/querido prepararse algo para pasar el día en el parque.
Desde hace ya dos o tres años la fiesta se celebra en otro parque, que curiosamente está a dos minutos de la casa de mis padres, en el parque de Oriente, pero curiosamente, esta ya no es mi fiesta...no sé supongo que ya la edad, pero sobre todo mi resistencia a profanar los recuerdos imborrables que guardo de mis cincomarzadas anteriores, me mantienen algo alejado de la idea de volver al parque (sobre todo hoy, que hace un frío que pela).
¿Y que celebramos en la cincomarzada?. Pues un hecho histórico, que está muy bien relatado en la wikipedia (podéis pulsar el enlace) y podéis leer en cinco minutitos, pero vamos que en resumen viene a ser algo relacionado con La primera guerra Carlista y la intentona por parte de los Carlistas de entrar en Zaragoza el 5 de marzo de 1838, intentona valientemente repelida por los Zaragozanos, que con su acción proporcionaron a la ciudad el título de "Siempre Heróica".
Y esto es todo. Espero que os haya gustado este pequeño paseo por mis cincomarzadas y por la historia de la Zaragoza de mi corazón.
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5 comentarios:
..por cierto...que ayer se suspendieron las celebraciones por el viento....no es la primera vez. Al ser en un parque, puede resultar peligroso la mezcla de aglomeraciones y árboles caidos...
Ah...y que nadie pasa por alto mi anterior entrada (las he puesto casi a la vez), por si quiere comentar el libro o quiere hacer alguna pregunta.
Qué tradición más chula, eh?. Esas cosillas te llenan de recuerdos. Colores, olores, sensaciones, ...de buenos recuerdos.
Me encanta el nombre CINCOMARZADA. Suena a superfiesta, en plan qué bien me lo voy a pasar y me voy a poner como el quico quirico, jejeje.
Por Alicante hay algo parecido la romería de la "Santa Faz". Cundo llegue igual lo cuento.
Por cierto, ¿Sabes qué aún hoy -vamos el próximo domingo- aún se presenta el partido Carlista a las elecciones?. Ya ves, aún reivindican la incorporación de los sucesores de D. Carlos María Isdro Rey, al trono de España. Impresionante.
Sí, sí...la tradición está bien...tal vez por su popularidad.
En cuanto a los Carlistas...INCREIBLE...¿qué interés puede tener alguién en seguir removiendo política de hace casi dos siglos?. Trabajando además con el convencimiento de que su esfuerzo es completamente inutil....INCREIBLE DE VERDAD.
Buen dato Javi_P.
cualquier dia Simon te dice que se va a esa fiesta!
apuntate con el!!
como dice Brian Adams.
18 TILL I DIE!!!!
Aunque sea una paradoja, los hijos son los que te envejecen y los que te devuelven a la juventud. Yo todavía me siento como un chaval. De hecho lo soy, quizás algo más cascarrabias (prometo mejorar).
Sin duda iré con él. Ya no te puedo asegurar que me ponga "del revés" como hacía en mis tiempos mozos, pero al menos, le acompañaré las primeras veces (si me deja, que ya se sabe lo chulitos que son ahora estos críos).
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