Llegamos los primeros, tras recorrer la distancia hasta Bolea capital y adentrarnos en los barrios "dormitorio" de las afueras. Debo quejarme (en voz baja) del proceso urbanizativo de la zona, todavía con la autovía sin asfaltar...por lo menos, no era de peaje.
Rica paella. Como siempre Koko, es un muchacho excelente. Aunque tenéis que reconocer que el pollo estaba bien cortado. Koko me enseñó esa nueva técnica de combinar cuchillo con maza para partir el pollo...la supervivencia en el campo...ah! sin olvidar a nuestro sponsor principal AMBAR, al cual queremos dar las gracias por su calidad y la de sus modelos comerciales.
Sobre todo, magnífica compañía,
aunque con ausencias que se echaron muchísimo de menos. Los peques se portaron fenomenal. También Torcuato, el "peque perruno". Jugaron con todo, incluidos cangrejos americanos y pequeñas carpas de la Alberca,
preciosa charca donde pasamos un rato estupendo por la tarde, dándonos un baño y descubriendo el dominio en las artes de la pesca de varios de nuestros compañeros de excursión; algunos de ellos nos demostraron que la destreza, por supuesto tiene componente educativo, pero también genético,
y algunos otros demostraron que, a los 36, todavía hay tiempo para intentar meterte en una barca hinchable y remar hasta los peligrosos manglares, mientras se proporcionan poses "artísticas" dignas de la mejor Almudena Cid. Qué grande eres Apeto!!...Ójala consigas tu sueño en Londres 2012.
En fin, un día magnifíco que disfrutamos de lo lindo y que esperamos vuelva a ser re-editado en 2009, esta vez con Richi y Ana. Fuerte abrazo para ellos y también para el resto.
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Y para finalizar esta entrada, aparte del contenido anterior, dejar comentado el último libro que he terminado estas vacaciones, MELOCOTONES HELADOS de Espido Freire (¿hermana de Oscar?), un libro ampliamente premiado, rápido y fácil de leer en el que se abordan temas bastante escabrosos como las sectas, la bulimia, y en general historias personales enmarcadas en un contexto un tanto misterioso, tal vez conferido por el propio carácter de los personajes. No es el típico libro, si lo que se busca es un buen argumento con una conclusión brillante, pero no te deja vacío en absoluto. No es que no tenga un buen argumento, ni una conclusión brillante (eso cada uno debe decidirlo), sino que, para mi, no es convencional. Tampoco ha sido uno de los libros que más he disfrutado, aunque es ampliamente recomendable.